domingo, 20 de diciembre de 2009

La obra del Espíritu Santo


El Espíritu Santo suele quedar relegado a segundo plano. Seguramente es por nuestra cultura y formación. Sin el motor los coches no pueden desplazarse. Lo mismo pasa dentro de la Iglesia, sin el Espíritu Santo la Iglesia no evoluciona, no marcha al ritmo de los tiempos.

Por qué tanto revuelo por el nombramiento del Obispo de San Sebastián, Sr. Munilla.

La Iglesia no es ni debe ser demócrata. La democracia es una palabra que no se utiliza para "nada" dentro de la Iglesia. Todo se mueve en función de la Obediencia y del Espíritu Santo.

Estas son las reglas que rigen la Iglesia. Puedes no estar de acuerdo con un nombramiento, pero respeta sus normas.

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