Compras y comidas... La Navidad se nos ha echado encima sin tiempo para otras cosas.
Tiempo para reflexionar sobre el misterio de la Encarnación...recordar que el Amor de Dios Padre es tan grande que nos ha enviado a su Hijo para que podamos ser felices.
Tiempo de vivir en Familia, de olvidar recelos y roces en nuestra convivencia...
Tiempo de descanso y de ocio.
Tiempo de llamar a los amigos y conocidos...
Lotería e ilusiones. Idas y venidas.
Cumpleaños de Miguel y de Blanca.
Felicidades!
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